Intelligentsia y sus socios de la cultura del café

El viernes seis de noviembre se llevó a cabo en la sede de Anacafé el evento público del Taller Extraordinario de Café,  , que realizó Inelligentsia, tostadores estadounidenses iniciadores junto a otros homólogos de la “tercera ola” del café.  Este es un evento anual que organizan por una semana en un país de origen para compartir con sus proveedores de todo el mundo.  Este año lo hicieron en Guatemala e invitaron el último día a productores de las siete regiones administrativas de Anacafé para compartir conferencias realizadas por sus productores socios.

Intelli

De las cerca de once exposiciones de sus proveedores y clientes de Latinoamérica, Africa y Asia, se pueden resaltar las siguientes lecciones:

  1. Profesionalización de los productores. Cada una de las conferencias presentadas resaltó aquellas prácticas exitosas y por lo tanto dignas de compartir.  De esta forma, Intelligentsia motivó a sus proveedores a ir más allá de simplemente producir café, los instó a investigar, plantear hipótesis, experimentar y adaptar resultados positivos. El mejor campo para la experimentación está en cada una de las unidades productoras, y aunque éstas sean diversas, como en el caso de la CoopeDota R.L de Costa Rica, “se debe buscar la excelencia en todos los procesos”, enfatizó Roberto Mata, presidente de la cooperativa por más de 25 años. “Lo mejor no es solo para exportar, sino para nuestros miembros”, enfatizó.  Incluso con el cambio climático, se extiende también a la experimentación de diferentes variedades que puedan ofrecer mejores respuestas a condiciones adversas y aún así conservar el perfil de calidad. Kamau Kuria, representante técnico de cooperativas en Kenya, ejemplificó este nivel de conocimiento de sus unidades productoras explicando cómo si se poda a las plantas jóvenes cada cinco o seis años se pueden producir más granos según tamaños de tipos AA, AB y PB que son mejor pagados por los compradores. “Es importante que conozcan cómo tomar decisiones en las plantaciones pero  orientadas al mercado”, agregó.
  1. Distinción desde la semilla. Según Camilo Merizalde, productor de Colombia, “desde la primera exportación que realicé hice promoción”, mostrando una fotografía en la que marcaba con su puño y letra el saco de yute. ¿Qué hace ese café diferente? ¿Por qué el productor considera que es diferente? ¿Qué hizo en el proceso de producción para tener un producto diferente? ¿Cómo se perciben esas diferencias en la taza? son algunas de las preguntas que debe responder el productor a sus compradores de manera que ellos a su vez utilicen como herramientas de promoción y mercadeo para el consumidor final.
  2. No escatimar si se trata de calidad: “El mejor premio es el que guarda en el bolsillo”. Con esa frase, XXXX de Perú explicó a los más de 200 productores de café que asistieron al evento, la motivación de todo empresario cafetalero eficiente.  Para ello, deben identificar en qué actividades es necesario hacer ahorros significativos y en cuáles no. Un ejemplo, citó es la fertilización adecuada para fijar, carbono, nitrógeno, potasio, fósforo entre otros. El conferencista hizo conciencia en los asistentes sobre la importancia de conocer bien sus costos de producción y no sacrificar la calidad de la taza.
  3. Más y mejor café. En su intervención, David Laughlin, del World Coffee Reaserch, explicó “la gente siempre va a tomar y va a consumir más café de “. Por eso, si el productor hace bien su trabajo, el comprador podrá hacer bien el suyo. El comercio directo de café tienen como principios básicos la calidad, remuneración acorde a esa calidad, relaciones duraderas basadas en transparencia, conciencia social y ambiental. “Nuestra generación y la generación anterior están más y más atraídos por los cafés llenos de sabor”, explicó también Geoff Watts, condueño de Intelligentsia, originalmente fundada en la ciudad de Chicago en 1995. Es por eso que aquellos productores comprometidos con estos principios y dispuestos a explorar, perfeccionar y participar en la mejora continua de la producción del café tienen más posibilidades de establecer socios comerciales duraderos.

Tal y como lo expresan Doug Zell y Emily Mange, cuando fundaron la emblemática tienda de los hipsters de café: “queremos que los productores con quienes trabajamos prosperen por lo que garantizamos el precio que se les paga directo y que es mucho más que los precios internacionales de comercio justo”. Al combinar la atención focalizada en sus proveedores con incentivos de precio por calidad de taza, “expandimos continuamente las oportunidades económicas y la posibilidad culinaria”, explican los visionarios que hoy tienen 10 tiendas en las ciudades de Los Angeles y Nueva York además de Chicago; oficinas y laboratorios en esas mismas ciudades además de Atlanta y San Francisco.

Actualmente, Intellentsia dio a conocer sobre una nueva aventura comercial con Peet’s Coffee & Tea, la tradicional y californiana cadena de café fundada por el holandés Alfred Peet en 1966, pionera e inspiradora cafetería de la “segunda ola” que surgió en contraposición del café instantáneo. Siguiendo los principios fundadores, explican “seguirán operando independientemente”. De acuerdo con la carta abierta publicada en su blog, Zell explica esta fusión con una analogía: “hemos estado mostrando nuestras obras de arte en una galería local y ahora tenemos la oportunidad de un lugar en el Louvre”.

Con el mejor glamour francés, Intelligentsia ofrece cambiar “tan solo para ser mejores”. Andres Montenegro, representante de #BorderlandsModel, no pudo aconsejar mejor a los productores al decirles que deben tener “mente, corazón y voluntad abierta para el trabajo. Porque esta Intelli, como la llaman sus seguidores, van con todo.